PRIMITIVOS

“Primitivos” retrata el camino de regreso a nuestros orígenes, a un estilo de vida más sencillo, en armonía con las cualidades fundamentales y esenciales del ser humano. Es una invitación a aventurarse a un desafío físico y espiritual para redescubrir el valor de la simpleza.

Lo que inicialmente imaginé como un proyecto fotográfico terminó siendo eso y mucho más. Los 321km que planeaba recorrer a pie por el llamado “Camino Primitivo” que atraviesa Asturias y Galicia al norte de España terminaron siendo más de 450km. Luego de una pequeña pausa en Santiago de Compostela, mi aventura continuó por el Océano Atlántico hasta el “Faro del fin del Mundo” en Finisterre. Durante 20 días me permití vivir una aventura sanadora, un viaje de re conexión con los aspectos esenciales de ser humano que a menudo olvidamos o colocamos en último lugar en nuestras prioridades diarias.

Eugenio Levis- Autor

El Proyecto

¿Qué nos pasa? ¿Porque sufrimos cada vez más de ansiedad y depresión? Por momentos la vida parece una carrera descontrolada hacia objetivos que prometen la felicidad, pero que dicho por quienes los conquistan: “Llegue a la cima y allí no hay nada”. Aspectos como la compasión, la sensibilidad artística, la empatía y la creatividad pasan a segundo plano frente a la optimización de tiempos, la productividad, la eficiencia y competitividad. Las comparaciones constantes, los paradigmas de belleza, las nuevas tendencias, la economía, el deber ser, el éxito, pantallas cada vez más grandes, y pantallas portátiles para cuando nos aburrimos de las anteriores. ¿Aburrirse? Eso ya no existe, el estímulo es constante, una necesidad vital.

El Camino Primitivo es una pausa, una bocanada de aire fresco, un botón de reseteo, una línea de comunicación directa y libre de interferencias a nuestro interior. “Primitivos” es una invitación a redescubrir un estilo de vida más sencillo, similar al de nuestros ancestros, alejado del ruido y la vorágine propios del entorno moderno, y en armonía con las cualidades fundamentales y esenciales del ser humano.

Al igual que en la vida, los Primitivos comenzamos a caminar con la única certeza de que el viaje llegará a su fin. ¿Dónde? Eso permanece en el misterio, y es parte de la incertidumbre con la que todos los seres humanos debemos aprender a convivir. Podemos imaginarlo, anhelarlo y hacer todo lo que esté a nuestro alcance para llegar a donde deseamos, pero la verdad es que no siempre depende de nosotros. Viajamos con poco equipaje, llevando solo lo esencial, eso nos ayuda a recordar que la satisfacción se encuentra en las experiencias y la construcción de relaciones significativas y no en posesiones materiales. Existen muchos idiomas, pero estas relaciones se construyen sobre los cimientos de un lenguaje universal que todos los Primitivos dominan: el lenguaje de las miradas, las sonrisas, la empatía y la camaradería. El camino nos presenta un estilo de vida activo, alejado del sedentarismo y las comodidades, y en constante conexión con la naturaleza y su energía sanadora. Cada paso del viaje nos recuerda el valor y la importancia de las pequeñas cosas, muchas de las cuales damos por sentadas en nuestra rutina diaria, como una ducha caliente, calcetines secos, un plato de comida, un abrazo o un techo bajo el cual descansar. El viaje de los Primitivos nos enseña que la vida no se mide por el destino al que llegamos, sino por el camino que recorremos y cómo vivimos cada día.

El objetivo de este proyecto es inspirar a quienes se sientan interpelados por el mismo a romper con su rutina diaria para intentar volver al origen, intentar re conectar con los aspectos más puros de nuestra humanidad, y en ese camino vivir una aventura refrescante y llena de significado. Un camino donde, la sencillez y el valor de los procesos por sobre los objetivos, les recordaran que la mejor forma de vivir la vida es paso a paso.

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